TEMA 1
"Con Jesús cooperando a la misión"
Objetivo: Ayudar a que cada niño y adolescente realice sus aportes misioneros
en favor de la evangelización universal especialmente en tierras de misión.
Contenido central:
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Conocer la importancia de cooperar para la misión de la Iglesia.
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Todos colaboremos en la tarea evangelizadora de la Iglesia con nuestras oraciones
por los misioneros de todo el mundo, especialmente por los misioneros mexicanos en
tierras de misión.
Sugerencias metodológicas:
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Preparar una mesa que se utilizará para poner los símbolos.
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Prever una estampa o imagen de la virgen y una velita que se utilizarán en el momento
de la oración.
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Prepara cantidades de copias de la hoja de trabajo de acuerdo a los niños del grupo.
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Si no se tiene la alcancía del grupo, prepararla para el encuentro.
PROPUESTA PARA EL ENCUENTRO
Saludo: Amiguitos y amiguitas de Jesús, en este encuentro en el que damos inicio a la preparación para nuestra Proyección Misionera Infantil en nuestra Diócesis de Teotihuacán en la que se nos invita a dar con alegría y gozo.
Como Infancia y Adolescencia Misionera nos proponemos seguir al maestro teniendo en cuenta lo siguiente:
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Nuestro estilo es el sugerido por el maestro, que «primero hacía y después enseñaba»: educar a través del servicio, de la acción.
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Nuestro programa es formación, información, oración, sacrificio y ayuda material para compartir los pequeños bienes personales.
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Nuestras oraciones van llenas de amor por las misiones y por nuestros amigos cercanos y lejanos uniéndonos a las intenciones misioneras del Papa.
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Nos sacrificamos como medio de ayuda en la acción salvadora.
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Damos ayuda material para compartir como signo de comunión y de amistad comprometida.
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Por eso: ¡Para un niño y adolescente Misionero, Cooperar es lo primero!
Canto: Salvar a los niños
Oración: (Utilizar los símbolos Vela-Luz, Alcancía-Aportes e imagen de la Virgen-Compartir)
“Gracias Señor Jesús por esta Proyección Misionera Infantil en nuestra Diócesis de Teotihuacán. Te pedimos que te quedes con nosotros, porque tú eres la Luz de nuestros corazones, para anunciar tu palabra a todos los niños y niñas. Enséñanos a seguir tus pasos y a dejarnos llevar por tú Espíritu de Amor. Ayúdanos a cooperar siempre con oraciones y aportes económicos para la misión universal, especialmente a la Misión Ad Gentes. Que todo lo que aprenda lo comparta a los demás, a ejemplo de la virgen María, que así sea, Señor! amén.”
Semilla misionera: 1Col 16, 1-2: “Con relación a la colecta a favor de los creyentes de Judea, hagan ustedes también lo que ordene a las iglesias de Galacia, que los domingos aporte cada uno lo que haya podido ahorrar, y no esperen que yo llegue para hacer las colectas”.
Reflexión: La colecta material y espiritual significa unir aportes para un fin específico por eso los niños y adolescentes de nuestro país ven la alegría de compartir a Jesús, que se tiene cuando se conoce, se aprende y se vive al estilo de él, donde orando, haciendo pequeños sacrificios y dando desde nuestra pobreza podemos proclamar a los cuatro vientos la verdad de que él está vivo y está entre nosotros, pues viviendo en comunión y ayudándonos mutuamente, el Reino de Dios se va instaurando.
¿Cómo los niños y adolescentes pueden cooperar? Bueno en tres formas muy maravillosas:
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Cooperación Espiritual: con el ofrecimiento de la propia vida cristiana (testimonio), la continua oración por las misiones y la ofrenda de los propios sacrificios, uniéndolos a los de Jesús por la salvación de los niños y del mundo.
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Cooperación Material: con la “ofrenda misionera” económica o con otros bienes materiales.
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Cooperación con Servicios Misioneros: Dios necesita nuestra colaboración, nos necesita a nosotros mismos como misioneros. Además, necesita que le ayudemos a promover las vocaciones misioneras.
Compartamos: (realizar la actividad propuesta dependiendo del nivel de formación)
Seremos Misioneros:
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Personal: Ayudar con alegría en los oficios o quehaceres del hogar.
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Medio Ambiente: Guardare $5:00 para darlo en el próximo encuentro.
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Más allá de las Fronteras: Rezaré un Padre Nuestro y un Ave María por los niños en tierras de misión.
Gracias Señor: “Niño Jesús, tu sabes que no tengo mucha fuerza, ni mucho dinero; pero yo quiero compartir con ellos todo lo que tú me has dado, para que conozcan también ellos la alegría de sonreír, porque tú los amas como tú me amas, amén.”